4 Competencias para liderar la transición verde

Para muchas organizaciones, la sostenibilidad se ha ganado un lugar en lo alto de la agenda. Pero este enfoque quizá nunca sea tan evidente como durante los acontecimientos de importancia mundial. Por ejemplo, cuando asistimos al inicio de la Conferencia anual de las Partes (COP) en los Emiratos Árabes Unidos entre noviembre y diciembre de cada año.

Allí, los países participantes se reúnen para revisar la aplicación de los acuerdos internacionales, así como para decidir iniciativas que impulsen la acción climática y fomenten la adopción de políticas.

Este año, con la advertencia de "ahora o nunca" para limitar el calentamiento global y reducir las emisiones para 2030, las empresas se ven cada vez más presionadas para reducir el impacto de sus operaciones. De hecho, uno de los temas principales de la conferencia de este año será el primer balance mundial de la historia, que informará sobre los avances mundiales en relación con la agenda climática.

Los resultados son condenatorios. Se está actuando sobre el clima, pero no lo suficientemente rápido.

Es necesario centrarse en la inclusión y la equidad para aumentar las ambiciones climáticas, así como revisar la canalización y distribución de la financiación para apoyar la transformación generalizada del sistema. Para las organizaciones con visión de futuro que aprovechen el alcance de la transición verde, existe la oportunidad de capitalizar nuevas (y más sostenibles) aperturas de mercado, acceder a nuevas corrientes de financiación y establecer colaboraciones a más largo plazo con un enfoque "verde" en su núcleo.

Pero para aprovechar la oportunidad, las empresas necesitan las capacidades adecuadas, desde profundos conocimientos especializados hasta los agentes del cambio que pueden forjar alianzas y ayudar a hacer realidad las ideas, a escala.

En respuesta, hemos detallado cuatro habilidades que serán fundamentales para crear una plantilla que impulse la transición hacia una forma de operar más ecológica.

1. Confianza en la comunicación

La urgencia de cambiar a un modo de vida y de funcionamiento más sostenible es una historia que debe comunicarse con credibilidad, autenticidad y pasión. Por lo tanto, una gran capacidad de presentación será vital para incorporar a las personas de toda la organización e instigar un cambio significativo.

Los mejores talentos también tendrán que comprometerse con una amplia gama de grupos. La transición ecológica representa uno de los mayores proyectos de gestión del cambio a los que se enfrentan las organizaciones. Será necesario establecer asociaciones con colegas, partes interesadas, clientes y comunidades para crear y aplicar estrategias para un futuro más sostenible.

2. Compromiso con la colaboración

El pensamiento aislado representa una "grave amenaza" para la transición ecológica.

Para garantizar que las preocupaciones medioambientales se extienden por toda la organización, los mejores talentos tendrán que defender la colaboración, asegurándose de que la responsabilidad va más allá de los departamentos de Recursos Humanos y Sostenibilidad. Cuando la sostenibilidad se considera una preocupación de "toda la empresa", los comportamientos, el valor y las decisiones tomadas se guían por una "Estrella Polar" de hacer lo correcto, a menudo por el beneficio, pero siempre por el planeta.

Las organizaciones pueden ayudar a las personas a derribar estas barreras fomentando una cultura de colaboración cruzada, pensamiento diverso y animándolas a desafiar siempre el statu quo, y comunicándolo como parte de una Propuesta de Valor para el Empleado (PVE) holística.

3. Agilidad y adaptabilidad

La transición ecológica ya está en marcha, con más de 3.000 empresas de todo el mundo que han establecido, o están en proceso de establecer, Iniciativas de Objetivos Basados en la Ciencia que las vinculan a la reducción de sus emisiones.

Sin embargo, todavía se está trazando el camino hacia un futuro más sostenible. Sólo en Europa, por ejemplo, el 45% de la reducción de emisiones será impulsada por tecnologías que aún no se han comercializado.

Esta innovación dará lugar a la aparición de nuevas funciones. La Organización Internacional del Trabajo estima que se crearán 24 millones de nuevos puestos de trabajo de aquí a 2030 como consecuencia de la adopción de prácticas sostenibles, incluido el desarrollo de transportes sostenibles, sistemas de energías renovables y edificios energéticamente eficientes.

Surgirán nuevas habilidades y funciones tan rápido como cambien otras, de formas que la mayoría de nosotros no podemos imaginar. En su lugar, las organizaciones tendrán que centrarse en la búsqueda de talentos basándose en su capacidad para aprender (y luego desaprender) nuevas habilidades a un ritmo rápido, en lugar de tomar decisiones basadas en las habilidades que ya han adquirido.

Para impulsar la transición verde será necesaria una fuerte "mentalidad de aprendizaje", que englobe a personas que muestren una actitud positiva hacia la mejora de las cualificaciones, altos niveles de aptitud y se muestren disponibles para aprender nuevas habilidades.

Las empresas tienen un papel fundamental que desempeñar a la hora de cultivar esta mentalidad, ofreciendo un programa de Aprendizaje y Desarrollo basado en las capacidades que esté en consonancia con una estrategia empresarial sostenible. Una formación a medida, impartida en un formato atractivo y accesible, permitirá a las personas seguir siendo ágiles y adaptables ante los cambios de prioridades.

4. Capacidad analítica

Una transición ecológica con éxito requerirá la implantación y ejecución de una detallada Supervisión del Rendimiento, lo que significa que los mejores talentos tendrán que estar bien versados en el análisis de datos.

Establecer una estrategia para unas operaciones más sostenibles requerirá la recopilación de datos de referencia sólidos y relevantes, que puedan utilizarse después para desarrollar unos ambiciosos KPI que abarquen a toda la organización.

Y los datos no deben limitarse a informar sobre la transición ecológica de una organización, sino que también pueden ayudar a darle forma.

Equipados con una visión general en tiempo real de las operaciones, los individuos pueden identificar las áreas del ciclo de vida de la entrega de productos o servicios con un alto nivel de emisiones y optimizarlas para reducir el impacto medioambiental.

Para apoyar el cambio a este enfoque proactivo, las organizaciones deben tener acceso a las herramientas y tecnologías que les permitan rastrear, supervisar y mejorar los elementos de todo el ecosistema de la cadena de suministro.

Adquirir las competencias para una estrategia de mano de obra orientada a la sostenibilidad

La comprensión de las competencias necesarias para impulsar una transición ecológica representa una pieza de un rompecabezas cada vez más complejo. Buscar, atraer, gestionar y retener el talento adecuado es primordial para que las empresas no sólo sobrevivan, sino que triunfen.

Pero el tiempo corre, y actualmente no estamos en vías de alcanzar un futuro de 1,5 grados. Las estrategias de talento que las organizaciones diseñen hoy influirán en su capacidad de transición hacia un modo de funcionamiento "más verde" el día de mañana.